Marina Rusa
-
Lo "llamativo" del buque es que lleva sin reportar señal del AIS, desde el pasado 18 de junio y a esa fecha estaba justo a la misma distancia de aguas españolas y marroquís, navegando a casi doce nudos. Son aguas internacionales.
Este buque de bandera rusa de siempre, obviamente suscita dudas por su larga estancia en zona, pero eso en principio es algo permitido, y puede alegar que se encuentra a la espera de ordenes.
Más llamativo es lo que los buques rusos están empezando a hacer, en aguas más norteñas, donde una corbeta rusa escolta abiertamente a dos petroleros de la Flota Fantasma por el Canal de la Mancha, el 16 de junio, la corbeta Boikiy, clase Steregushchiy, escoltó a dos petroleros por el canal, y además fue publicado en la prensa rusa, que señalaba que se trata de una operación rutinaria, sobre todo para el Boikiy, que ya había realizado otra escolta de tres días bajo intensa vigilancia británica frente a sus costas para el Baltic Leader, el buque ro-ro conocido en Francia por haber sido apresado en Boulogne al estallar la guerra en Ucrania.
Además ya se realizó otra operación con petroleros como la del Selva (también conocido como Nostos o Naxos), con bandera de Palaos, y Sierra (o Suvorovskiy Prospekt), con bandera de Malawi, que pertenecen a la flota fantasma rusa y están sujetos a sanciones británicas y europeas, respectivamente. Según sus datos AIS, los tres buques coordinaron sus movimientos durante su travesía por el Canal de la Mancha, actualmente se encuentran entre Suecia y Polonia y según el medio ruso Insider el Selva inicialmente llevaba bandera panameña y fue cambiado durante el camino.
En estos casos dada la escalada de los embargos contra la flota oscura, Rusia ha comenzado a escoltar sus barcos para facilitar el transporte de materias primas clandestinas algo que ya se viene observando en los últimos meses. Sin embargo, este convoy en el Canal de la Mancha es una primicia, lo que indica el deseo ruso de eludir por la fuerza las sanciones internacionales. Lo que algunos ya empiezan a señalar que podría ser una forma de poner a prueba la tolerancia de Occidente ante la escalada, algo que sugiere la secuencia de esta travesía y el reciente paso del petrolero Marathon (o Udaya), que partió del puerto ruso de Primorsk, en la zona económica exclusiva (ZEE) alemana, y luego en la danesa a través del estrecho del Gran Belt, antes de ser interceptado por las autoridades marítimas danesas.
Esto ya sería otro asunto más espinoso, el buque militar ruso, no creo que permitiera el abordaje.