La coreana Hanwha Aerospace firmó un acuerdo por valor de 250 millones de dólares para suministrar a Vietnam 20 obuses autopropulsados K9. El contrato, firmado en julio, marca la primera exportación de sistemas de armas avanzados surcoreanos a Hanói y al Sudeste Asiático en general.
Para Vietnam, la adquisición representa un avance en la modernización de su artillería. Su arsenal actual se basa en gran medida en sistemas heredados, como el obús D-30 de 122 mm de diseño soviético y el cañón autopropulsado 2S1 Gvozdika de 122 mm, cuyos alcances y potencia de fuego son limitados en comparación con las plataformas modernas.
El K9 A1 ofrecerá a Vietnam un alcance y una movilidad superiores, lo que le permitirá mantener zonas estratégicas en riesgo y reducir la dependencia de posiciones de artillería estáticas. Esta transición a la artillería sobre orugas moderna refleja la intención de Hanói de desplegar una fuerza más flexible y con mayor capacidad de supervivencia, capaz de responder rápidamente tanto en operaciones defensivas como disuasorias.