La capacidad de la industria militar va a depender del dinero que el gobierno de turno invierta y no va a haber mucha diferencia entre industria privada o pública. Navantia da pérdidas pero al final si miramos el total de la inversión que hacemos en la misma y comparamos con lo que nos hubiesen costado los mismos buques fuera (ya sin contar la ventaja que puede ser tener el I+d+i y la capcidad de producción aquí) posiblemente nos demos cuenta de que nos sale bastante a cuenta. Otra cosa es si realmente hubiésemos contratado todo lo que hemos contratado de tener que hacerlo fuera y que sí, efectivamente es dificil hacer rentables 3 astilleros con nuestro volumen de pedidos. O incluso que haya programas como el S-80 que deban calificarse de desastre.
Con AIRBUS la apuesta es distinta y el sector también es distinto y el problema real es que AIRBUS va por delante como empresa de lo que va Europa como "unidad política". Al final es forzoso reconocer que nuestras urgencias por dejar atrás el oscurantismo de la dictadura e incorporarnos al club europeo y a la esfera occidental en los 80 y 90, nos hicieron entrar de una manera un tanto servil, en mi opinión, tanto a la OTAN como a la UE. Seguramente era lo que tocaba y soy un europeista convencido, pero también estoy convencido de que nos pudo el ansia y no miramos con suficiente detenimiento la letra pequeña y las implicaciones de muchas de las cosas que firmamos en su día, también, porque no decirlo porque necesitabamos como el comer esos fondos europeos que al final tampoco supimos aprovechar del todo bien.
En cuanto a AIRBUS, llorarán pero posiblemente nada cambie demasiado porque lo cierto es que se les seguirá contratando trabajo y además difícilmente les salga más económico pagar mano de obra cualificada en Alemania o Francia que en España (ventajas de tener tanto ingeniero en paro...).
y el articulito del confidencial, sobre el tema:
https://www.elconfidencial.com/empresas/2019-09-18/airbus-presiona-sanchez-rey-perder-coordinacion-nuevo-eurofighter_2237423/con un par de destaques:
"todos los representantes públicos han transmitido —y transmitirán hoy— los mismos mensajes a Airbus. Primero, que elegir una empresa 100% nacional es la mejor vía para desarrollar tecnológicamente la industria española,
y no solo la vertiente de producción, para hacerla líder en alguno de los sistemas, equipos y radares que conformarán el FCAS."
"España se encuentra ante la oportunidad de liderar algunos de estos pilares del programa y aprovechar la financiación y el impulso de un programa de estas dimensiones para desarrollar un sector potente de sistemas de defensa con capacidad exportadora. Lo que supone resucitar la vieja idea que puso encima de la mesa el Gobierno de Zapatero de tener un campeón nacional en defensa. Para ello, cuenta ya con el exministro de Industria Miguel Sebastián en el consejo de administración de Indra."
"España asiste al lanzamiento de un programa aeronáutico en el que el protagonista no es el avión, sino un sistema de gran complejidad en el que el reto tecnológico reside de un modo muy especial en la nueva generación de sensores inteligentes (radares, defensa electrónica, optrónica, etc.), plataformas autónomas, novedosos sistemas de comunicaciones, estaciones terrestres, almacenamiento y explotación masiva de datos en tiempo real, inteligencia artificial y soporte a la decisión, interfaces avanzadas y realidad aumentada para el piloto y los operativos terrestres así como nuevas capacidades electrónicas capaces de procesar el exigente entorno de datos e información planteado."
Quien siembra vientos:
"Este conflicto se da tras diversas tiranteces entre el Gobierno y Airbus. El cambio de la dirección de los programas de aviones de transporte militar de Aribus —C295 y A400M— a Múnich hace unos años fue recibido como un mazazo por el Gobierno de España."
Eso sí, esperemos que se haya ponderado bien la jugada.